Al contratar nuestros servicios pondremos a disposición todo lo necesario para asesorarles en sus decisiones de que pintura o color elegir.
La pintura es un material con enormes posibilidades decorativas. Con pintura se puede renovar el aspecto y la decoración de un ambiente sin hacer grandes reformas. Las opciones van desde una pintura lisa (un color por habitación o en combinación de dos o más colores en distintas paredes) hasta las diversas técnicas de efectos decorativos como estuco, tierras florentinas, génesis, etc…
La pintura lisa aporta un acabado limpio a la decoración siempre que el color o los colores elegidos sean los correctos. Existen en el mercado una enorme cantidad de calidades y tipos de pintura, además de una variedad infinita de colores a elección. Por eso es importante detenernos a repasar las claves para una buena elección.
Los dos factores a tener en cuenta al momento de elegir la pintura son: el tipo y el color.
La elección del tipo de pintura que utilizaremos dependerá del uso que vayamos a dar al ambiente y del acabado que queramos lograr. Algunas paredes en contacto con chicos, por ejemplo, más proclives a ensuciarse, necesitan un tipo de pintura de fácil limpieza. Por eso es importante conocer todas las variantes.
Las pinturas de calidad garantizan siempre un color uniforme y una mayor perdurabilidad en el tiempo.
Existen dos grupos básicos de pintura:
› Pinturas al Agua (Plástica)
› Pinturas al Aceite (Esmaltes).
Por su parte, estas pinturas se pueden dividir según el tipo de acabado:
› Satinado (con poco brillo o brillo intermedio)
› Mate (sin brillo)
› Brillante